Un hoyo es un agujero natural o artificial, hecho en una superficie.
Vienes tranquilamente, quitado de la pena caminando en una superficie plana cuando de repente, sin más aviso, se abre un hoyo a tus pies y caes irremediablemente hasta el fondo. La sorpresa es la primera que hace su aparición: ¿Qué? ¿Cómo?
Y después del golpazo empiezas a sentir los golpes, raspones y moretones que te quedan después de haber caído.
Puedes empezar a gritar ¡Auxilio, Ayuda! y muy probablemente alguien te escuchará, pero también puedes perder tiempo enojándote, pataleando, aventando la tierra de un lado al otro y haciendo un verdadero berrinche por lo que te pasó, logrando por supuesto que caves un hoyo aun más profundo. También puedes quedarte en silencio repasando a todos los ineptos, que seguramente tuvieron la culpa de que tú no hayas visto el tal hoyo, logrando por supuesto que surja un enorme resentimiento y la pérdida de un tiempo valioso buscando a todos los culpables y haciendo que tu estancia en “el hoyo” sea eterna.
Y entonces surgen las otras preguntas ¿Por qué yo? ¿Por qué a mí? ¿Por qué así? Y entonces nos convertimos en VICTIMAS.
Este “hoyo” puede ser algún evento en nuestra vida que nos hace tocar el fondo más profundo y triste. Yo creo que todos los seres humanos nos hemos sentido en algún momento en esa situación: Un rompimiento amoroso, la pérdida de un ser querido, el desempleo, en fin, todo lo que tiene que ver con PÉRDIDAS. Y podemos también patalear, buscar culpables, reclamar al destino y estancarnos en un hoyo cada vez más profundo de amargura, indefensión y debilidad.
Cuando caemos en un hoyo es necesario hacer consciencia de lo siguiente:
- Tómate el tiempo para hacer el “recuento de los daños”. Checar los golpes, los raspones, las heridas que nos dejó ese evento.
- Es importante al ver los golpes, sentir el dolor. Y en este punto se vale llorar, se vale gritar y expresar al exterior el dolor y el impacto de la situación.
- Después podemos analizar la serie de eventos que nos llevaron a ese hoyo y quizá nos demos cuenta de que no fue tan sorpresivo. Es muy probable que la tierra ya se me haya movido en distintas ocasiones, enviándome mensajes de que algo iba a suceder. Aquí es donde podemos dejar de buscar culpables y entender que quizá nosotros colaboramos para llegar a ese punto también; y no para recriminarnos sino para entender que tomar el control de la situación y dejar de sentir que otros mueven los hilos, es muy sanador.
- No caer en la autoflagelación. Tan malo es ser víctima como ser nuestro propio verdugo. Cero culpas.
- Y en este proceso podemos también PEDIR AYUDA. A veces pensamos que podemos solos con una situación que se haría más ligera si alguien más nos ayuda a cargarla, y a resolverla. Cuando grito ¡AUXILIO, AYUDA! alguien puede tener una escalera, estirarme un brazo o formar una cadena de ayuda que me recordará que somos frágiles y que siempre hay Ángeles en el Equipo.
Todos hemos estado, estamos o estaremos alguna vez en un “hoyo existencial” y si lo manejamos bien podemos salir más fortalecidos y más maduros de estos eventos.
No te vaya a pasar que por manejarlo mal, le des el significado que también tiene esta palabra en el diccionario:
HOYO: Sepultura o agujero hecho en la tierra para enterrar a un cadáver
Y conozco a muchos “cadáveres vivos” que un día dejaron de luchar, de pedir ayuda y ahí siguen…. EN EL HOYO.
¡DIOS TE BENDIGA!
Comentarios
Gracias Martha y Guillermina. Dios las bendiga y que nos sigan dando fuerza para salir mas fortalecidas de las pruebas de esta vida. Un beso cariñoso.
Hola! Me gusta tu pensamiento. Me da mucho sentido todo lo que expresas. Yo estoy pasando por una situación muy similar. Espero pronto encontrar a es "ángel", o a esa "escalera" y que suceda un milagro en mi vida, que me ayude a salir adelante. Gracias por tus palabras. Me dan fuerza para segui adelante. Saludos desde León. Guillermina.
muy buenas palabras,es la realidad gracias Dios cuide de ti,muy exacto lo que dices yo lo vivi y hay voy luchando para salir del tremendo hoyo y reconociendo,aceptando y hechandole pa delante,gracias infinitamente gracias por estas palabras q me reconfortan para seguir de pie y adelante simplemente pq lo q expresas es la realidad de absolutamente todo lo que dices,gracias