Publicado por CHEPINA PERALTA el 12 de Abril de 2010 a las 7:16am
En mis ignorantes mocedades, para mi la cocina era un lugar en donde se cumplía una obligación no muy agradable. Pero, ahora se que la cocina es un espacio luminoso en donde todo puede suceder, un sitio sin límites para aprender, un punto que genera viajes aun que sean imaginarios, es el lugar de las confidencias, de la charla amistosa, de los amores. Por eso digo, que en la cocina…… en la cocina, se cocina la vida.Si, en la cocina aprendí a cocinar la vida. Para cocinar la vida, no hay recetas, los ingredientes los encuentras por ahí todos los días. De ti depende que uso les des, de ti depende si los aprovechas o no.Así como para cocinar la vida, para hacer platillos bien hechos, aun que sean sencillos, se necesita valor, olvidarse del miedo y arriesgarse a cometer errores. Que se quemó, se resecó, quedó desabrido, no cuajó, bueno pues corregimos el error y seguimos intentando una y otra vez hasta perfeccionar el platillo.Platicando de esto con los nietos jóvenes, recordé un incidente que me sucedió en la TV.Durante 10 años mi programa pasaba en vivo, esto nos obligaba a tener todo perfectamente calculado, desde el lugar de los alimentos, los movimientos, el lugar de los utensilios, había que entrar al aire al segundo.Un día llego a trabajar, y me encuentro que estaban haciendo algún arreglo en el estudio que normalmente pasaba “ Chepina y su Menú Pando”. Por lo que habían acondicionado el lobby del teatro estudio para trasmitir desde ahí en aquella ocasión.Nos organizamos los chicos del staff, mi ayudante y yo para tener todo en orden y listos para empezar, cuando un extraño rechinido sonó sobre nuestras cabezas, un tuvo se había desprendido y en un abrir y cerrar de ojos, calló atravesado sobre la mesa en la que yo iba a trabajar haciendo volar por los aires recipientes e ingredientes.Rápidamente todos reaccionamos, recogiendo del piso lo que pudimos salvar y colocándolo sobre la mesa de cualquier modo, cuando escuchamos al floor manager el consabido SILENCIO, CHAMARAS VAMOS AL AIRE.En aquel momento sentí el piso terriblemente resbaloso, era la crema que yo iba a usar y que no pudimos salvar, Empiezo a escuchar un vals, el ingeniero de sonido, sin saber lo de la crema, pensando en ayudarme, puso una música para que yo pudiera relajarme, la que yo en seguida aproveché para darme tiempo para pensar que iba a hacer yo con todo aquel desastre sobre la mesa, empecé a improvisar diciendo que me estaba acordando de los bailes de 15 años en Viena con los cadetes y no sé que mas mientras llegaba a mi mente alguna idea. En unos segundos que me parecieron eternos, se me ocurrió decir que ese día había limpiado el refrigerador, mostré lo que había encontrado y sugerí que cuando esto ocurriera en nuestras casas, había que utilizar la inteligencia y el buen gusto para aprovechar los poquitos que tuviéramos y lograr algo sorprendente.Lo que se había salvado era arroz cocido, rebanadas de manzanas en almíbar, ciruelas pasas deshuesadas y algo de crema ,todo aquello con lindos pedacitos de vidrio que a cámara no se notaban y que los camarógrafos tuvieron cuidado de no enfocar de cerca.Con todo aquello organicé una especie de budín al que llamé “Palazzo Beneto”el cual se fue derechito a la basura cuando terminó el programa. Después lo hice naturalmente sin vidrios en la cocina de mi casa, quedó tan bien que lo publiqué en uno de mis recetarios.Lo que coronó aquel agitado programa, fue que al terminar escuché una cerrada ovación con gran júbilo, en ese momento, me di cuenta que todo el staff había estado sufriendo junto conmigo y apoyándome, REALMENTE FORMÁBAMOS UN EQUIPO.Los nietos estuvieron muy atentos al relato, me sorprendió sus comentario todos aplicados al cocinar la vida en cada día, debo confesar que la abuela se sintió muy orgullosa de sus poyuelos.Me sentiría muy contenta si Uds. Encontraran en esta historia algunas ideas útiles y me gustaría preguntarles: “TU COMO COCINAS TU VIDA?.”Hasta la próxima, que usted la guise bien,Chepina
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Chepinaaa ¡¡ Que emocion leerte, yo soy una de tantas personas q marcaste con tu ameno programa de cocina,quiero q sepas q aparte de aprenderte muchos platillos, dejaste en mi, q cocinar debe hacerse con amor y alegria para q el resultado sea exquisito, ademas q cocino como tu, con musica suave y agradable y de ese modo es mucho mejor, y aunq trabajo y muchas veces cocino a la carrera, no por ello lo hago de otro modo. Gracias por tu legado.
Como siempre Chepina, nos dejas un agradabilísimo sabor de boca, muchas gracias por compartir esta historia, tienes mucha razón, a veces cuando improvisamos, nos damos la oportunidad de aprender de nosotras mismas, de nuestros alcances y capacidades. Nuevamente gracias.
hola chepina me encanta cocinar pero trabajo todo el dia pero he aprendido de ti que cocinar es un arte y solo se nececita sentido comun y creatividad para cocinar rico y ponerle toda nuestra buena vibra que emana de nuestras manos para preparar ricos platillos,gracias por todo lo que nos has enseñado.
hola Chepy, cuanta razón tienes, además de "cocinar la vida" lo más loable es "El austero lujo de lo esencial" La casa la construye el ama de casa y la edifica cuando día con día va dejando su alma en el lienzo que limpia y lustra el hogar. Despues de mi jornada de trabajo en la oficina, llego a casa a preparar la cena (nuestra comida principal) y unas horas antes empieza el conflinto "que hago de cenar" mis hijos les gusta la carne, a mi esposo le hace daño, mi mamí y yo queremos bajar de peso. seria fabuloso que plublicaras en este medio algunos consejos, tips para sacarnos de este dilema, no debo ser la única desesperada a la hora de preparar la cena. gracias!!! Chepy por compartir tu GRAN EXPERIENCIA.
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