Publicado por CHEPINA PERALTA el 31 de Marzo de 2010 a las 11:11am
CAPÍTULO IIDESPUÉS DEL SALARIO DEL MIEDOPor: Chepina PeraltaPara los amigos que no leyeron mi colaboración anterior, les cuento que por azahares del destino al ver la más reciente película de Meryl Streep que se llama “Julie & Julia” (que cuenta parte de la vida de la Chef Julia Child, primera mujer en hacer un programa de televisión de cocina en 1963), vino a mi mente el inicio de mi carrera en televisión en 1967, con un programa que se llamó “Su Menú Diario”. El “utilero” (Sr. Ibarra) de aquel primer programa que hacíamos con muy pocos recursos (técnicos, económicos y de producción), bautizó el programa como “El Salario del Miedo”.Desde aquel momento me han llegado en cascada múltiples recuerdos de la historia de mi paso por la TV, que titularé “COCINANDO LA VIDA” ¿qué les parece?. Y también les pido su opinión respecto al tema, esto es, si sigo con la historia, que no va a ser muy completa ya que necesitaría varios números completos de la revista para contarla a detalle, pero si verídica, o… cambio de canal. Sean tan amables de poner sus comentarios en mi página web www.chepinaperalta.com, o bien, directamente a la revista.LICENCIA DE LOCUTORAEl Salario del Miedo duró aproximadamente un año. La Señora que ideó el programa se fue de México y el programa terminó. Para ese tiempo ya había pasado mis exámenes y sacado mi Licencia de Locutora. En esos años nadie podía estar en un programa de radio o televisión sin conocer perfectamente las leyes de radiodifusión, que entre otras cosas legislaban la obligación que tenían los medios de diversión e información de proteger el lenguaje, no se permitían palabras, ni actitudes soeces, nada que ofendiera al público, entre otras muchas cosas.Por ejemplo, en la forma de anunciar bebidas alcohólicas se cuidaba de que no incitar al exceso y solamente se debían anunciar a determinadas horas. Para obtener la licencia, el candidato debía demostrar amplia cultura general y se evaluaba el criterio y responsabilidad para estar ante los medios de comunicación masiva. Incluso cuando se recibía la licencia se hacia un juramento, en el cuál una se comprometía para hacer buen uso de ese nombramiento y para trabajar por el bien de la comunidad. ¿Seguirán rigiendo las mismas leyes?. ¿Los actuales conductores tendrán licencia y harán ese juramento?. Son preguntas!!!.“CHEPINA Y SU MENU PANDO”El fin del programa coincidió con una laringitis que me tuvo afónica y algunos otros trabajos que me mantuvieron en casa… pasaron como 2 meses. Entonces pensé, ya tengo mi licencia, ya conozco el ambiente y se trabajar en él, voy a ir a TELE SISTEMA MEXICANO (así se llamaba entonces TELEVISA, que aún no nacía) y a lo mejor encuentro un trabajillo.Cual no seria mi sorpresa que inmediatamente que llegué me pasaron a la oficina del Director de la TV Matutina… me recibió casi a gritos cubanos, reclamándome donde me había metido, pues no tenían mis datos y me andaban buscando con urgencia, tenía sobre su escritorio una cantidad muy grande de cartas, llamadas, telegramas de mujeres que reclamaban mi programa y lo más importante… TENIAN UN PATROCINADOR QUE QUERIA COMPRAR EL PROGRAMA, QUERIAN QUE YO LO VENDIERA. Tuve que respirar profundo y sentarme bien antes de responder.Se acuerdan de la película “Billy Elliot”?, cuando el niño recibe la carta de aceptación para la escuela de “ballet” de valet de Londres, que se va a su recámara y se queda un rato abrazándola completamente fuera de este mundo… así llegué a mi casa. Cuando volví en mi y empecé a razonar, lo primero que hice fue pedir una cita con el Sr. Cabarga, que era el Presidente de la agencia de publicidad que estaba vendiendo mi programa, por teléfono me informó que en 3 días tendríamos una cita con todo el equipo del programa y que ahí hablaríamos. Una gran luz iluminó mi cerebro y le pregunté:- ¿Sr. Cabarga, quiero saber qué espera de mi?.- Todo Chepina, respondió, yo nunca vi su programa, ni lo conozco, la realidad es que lo estamos comprando solo por la gran cantidad de cartas y llamadas de mujeres que lo piden…- Entonces Sr. Cabarga, le pido una reunión previa en la que estemos solo usted y yo, y ya después platicamos con todo el equipo ¿qué le parece? (en aquel momento decidí que no tendría que convertirse en una negociación de un contrato colectivo).- Claro Chepina, me parece una idea magnífica, concluyó Cabarga.9 AÑOS AL AIREAunque con una gran inseguridad y desconocimiento, acudí a la cita, el miedo lo dejé fuera. Platicamos largamente, le contesté al Sr. Cabarga todo lo que preguntó y le conté lo que yo quería, me confió que dependían completamente de mi y me pedía todo mi apoyo. AHI NACIO LA NUEVA CHEPINA, LA PERSONA QUE TOMO LAS RIENDAS DE SU VIDA.Recuerdo que lo único que le pedí fue cambiar a mi ayudante, pues tenía problemas de comunicación con ella, a lo cual accedió enseguida y me pidió que el día de la reunión con todo el equipo llevara a la persona que yo asignara, y así lo hice. Desde que entré a la sala de juntas (ya con todo el equipo), sentí que se avecinaba una tormenta, la productora y quien había sido mi ayudante, habían registrado como de su propiedad el programa “Su Menú Diario”, entonces nadie podía hacer nada sin su autorización, ni el patrocinador que estaba presente, incluso ellos podían cambiar de conductora (o sea yo).Cuando el ambiente se hizo muy tenso, el Sr. Cabarga pasó su brazo sobre mis hombros y me condujo suavemente hacia la puerta, diciéndome casi al oído: “No se preocupe, usted y yo ya hablamos… la llamo mañana”. Al día siguiente me entero que la sangre llegó al río, que el patrocinador dijo que compraba el programa sin esas dos personas y que deseaba que el nombre del nuevo programa fuera mi nombre.Ese fue el principio de “Chepina y su Menú Pando” que duró 9 años al aire, pasando todos los días en vivo. “El Salario del Miedo” se convirtió en “El Salario de la Vida”. Y entonces… pues a trabajar Chepina, a diseñar tu propio programa, a buscar contenidos, a diseñar tu cocina… a cocinar tu vida…En tanto ¿qué pasaba en mi casa?. Yo era una mujer casada con 5 hijos, que iban desde los 5 y hasta los 18 años. Mi marido y mis hijos me apoyaron y estaban interesadísimos en todo lo que me estaba pasando, se regocijaban, opinaban, preguntaban, y entre todos, organizábamos los trabajos de la casa, sin que faltaran las indispensables discusiones fraternas. Puedo asegurar que si yo hubiera diseñado mi trabajo, nunca lo hubiera hecho tan bien.En ese lugar pude desarrollar al máximo mis capacidades y gustos, al tiempo de que se me abrió una oportunidad inigualable de crecimiento, pues los conocimientos que yo tenía en ese momento, no hubieran sido suficientes para tener una emisión diaria, que al principio solo fue de televisión y años más tarde también pasaría a la radio.¡Gracias por los recuerdos!. Este relato está trayendo a mi memoria una parte muy importante de mi vida, que como muchas otras historias, se entrelaza con la vida de cientos o miles de personas que han enriquecido mi existencia. Anécdotas, estudios, personajes ¡todos quieren aparecer!... tendré que ordenarlos.Por ahora me despido, con la frase que por muchos años utilicé en el cierre de mis programas:¡Hasta la próxima, que Ud. la guise bien!.Chepina
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Señorona Chepina Peralta , siempre me ha cautivado de Ud. aparte de su manera de cocinar ,ésa amenidad con la que adereza sus programas, quiero decirle que incluso cuando mis hijos estaban pequeños ,se sentían muy motivados para verla en la televisión sin estar interesados en la cocina porque decían que Ud. era la persona más simpática de la programación y les encantaba escucharla además de verla , desde luego que yo sí aprovechaba sus recetas....le mando todo mi agradecimiento por traer a mi mente toda esa nostalgia con mis hijos, la saludo con cariño y seguiré siendo su seguidora, gracias.
Yo, de veras quisiera guisar bien. Aunque tengo la responsabilidad de guisar para mi familia, no se mucho de cocina; por eso me atrevo a sugerir que se aderezaran estas interesantes anècdotas con un algunas de las recetas presentadas en aquellos programas. ¡Para mi serìa maravilloso! Gracias.
Felicidades por seguir siendo una mujer positiva y que conserva en su memoria todos esos detalles, yo recuerdo mucho el programa de Imevisión y como creo que toda persona que lo haya visto, quedé enamorada de la cocina, de la manera en como nos hacia ver lo fácil que era lo difícil y la ayuda que nos dio en el momento en que muchas empezabamos a ser amas de casa, sus recetas, comentarios y consejos me ayudaron mucho. estoy muy contenta de poder, al fin darle las GRACIAS!!!!
Ojalá siga con estas historias, nos hace recordar a nosotras parte de nuestras vidas. Escribe muy ameno igual que como conducia sus programas en la tele y el radio, a mi me sirvieron mucho para aprender nuevas recetas y secretos de cocina y a mis hijos les ayudó a iniciar su aprendizaje para cocinar con cosas muy simples y divertidas, gracias y ojalá siga escribiendo.
Lo que más me encantaba de tus programas era el momento en que sacabas totalmente terminado el platillo. Siempre me encantó tu sentido del humor en cualquier tarea, te tengo presente iniciando un proframa con un pollo entero, descabezado y bailando, todo pelón. Aún hago muchas de tus recetas. Felicidades por no convertirte en Diva. Sol
VAAAAYA!!!! ....DE HABER SABIDO KE ESTABA EN ESTA PAGINA HACE MUCHO KE LA HUBIERA SALUDADO Y FELICITADO PS SOY UNA AMA DE CASA, FERVIENTE ADMIRADORA SUYA Y SEGUIDORA DE SU PROGRAMA POR LO KE ANTES ERA IMEVISON (AHORA TV AZTECA) ME ENCANTABAN SUS RECETAS, SOLO KE NO LOGRE TENER SUS LIBROS, EN FIN, LE ENVIO SALUDOS Y ABRAZOS.
ISSITA ALVARADO
Comentarios
Señorona Chepina Peralta , siempre me ha cautivado de Ud. aparte de su manera de cocinar ,ésa amenidad con la que adereza sus programas, quiero decirle que incluso cuando mis hijos estaban pequeños ,se sentían muy motivados para verla en la televisión sin estar interesados en la cocina porque decían que Ud. era la persona más simpática de la programación y les encantaba escucharla además de verla , desde luego que yo sí aprovechaba sus recetas....le mando todo mi agradecimiento por traer a mi mente toda esa nostalgia con mis hijos, la saludo con cariño y seguiré siendo su seguidora, gracias.
ISSITA ALVARADO