Hola amigas el trabajo cualquiera que este sea es como andar en bicicleta: tenemos que pedalear y pedalear para no caernos. Sin embargo, muchas veces la rutina y el cansancio nos derrumban; dejamos de pedalear y el trabajo se vuelve una carga.
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Pero déjame decirte que todo se controla por la mente, el estrés es también cuestión de actitud.
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Ejercicios mentales básicos
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Paso 1: Analiza todos tus prejuicios y complejos personales. Soy muy mala para este trabajo, nunca podré hacer tal cosa, a mí no se me da esto... No se imaginan el enorme impacto negativo que estas afirmaciones tienen en nuestro desempeño laboral e incluso en nuestra salud (terribles dolores de cabeza, por ejemplo).
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El remedio para eliminar toda esta mala vibra, es reemplazar los prejuicios con autoafirmaciones que generen energía positiva, como: soy muy buena en esto, sé que lo puedo hacer mejor, tengo excelente memoria, todo me va a salir muy bien, etc.
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Paso 2: Realiza afirmaciones verbales. Una vez que cambiamos las negaciones por afirmaciones, es necesario que las repitas verbalmente. Es increíble cómo el cerebro capta tu mensaje, y todo lo que dices se vuelve realidad.
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Repítelas durante un período mínimo de 21 días, ya que de esta forma será posible que nos deshagamos de las vías negativas que hemos construido en nuestra mente para que las nuevas actitudes echen raíces y modifiquen el patrón de conducta.
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Paso 3: Realiza afirmaciones visuales. Es necesario también visualizar por unos minutos pensamientos de salud, fortaleza o de cómo queremos que sean las cosas; de esta manera estaremos aún más motivados para que sucedan.
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Paso 4: Adopta una actitud proactiva. Da el primer paso, empieza a hacer y a actuar las cosas que deseas cambiar para sentir los buenos sentimientos. Con esto reforzarás nuevas conductas e influenciarás positivamente a tu sistema inmunológico.
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Paso 5: Aprende a tener buenas relaciones con tus compañeros. Aunque no lo creas podemos tener un estado mental saludable si las relaciones con los demás son estables y sanas.
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Paso 6: Mantén siempre el contacto con la naturaleza. Cuando interactuamos con la naturaleza, experimentamos sensaciones placenteras que benefician al organismo. Realmente es una terapia respirar aire fresco y no ser indiferente hacia las maravillas que nos ofrece Dios, fuera del trabajo.
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Paso siete...Cambia tu manera de pensar y todo lo que realices saldrá excelentemente bien. ¡Te lo aseguro!
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Reciban un cariñoso saludo deseándoles que este mes sea lleno de bendiciones.
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Juan Fernando Campos (JuanFer)
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Comentarios
excelente aportacion JUAN FER un abrazo