Publicado por mariona el 27 de Noviembre de 2009 a las 7:00pm
como madre, sí, como mujer, pero sobre todo, como la niña que alguna vez fui, no puedo ser indiferente a este problema y a sus implicaciones aunque, por supuesto, quisiera comprender sus causas, más que nada. No me cabe en la cabeza, sencillamente. El abuso sexual a menores es una cuestión cotidiana que ocurre en todos los lugares de nuestro país, en todos los estratos sociales y en todos los niveles de formación académica; dentro de este panorama es el círculo familiar el escenario más común para la emergencia del fenómeno. Nadie logra imaginar las huellas tan profundas que deja ser abusado en la infancia, lo difícil que es armarse una vida luego de tomar conciencia de lo sucedido (pues muchas veces no es sino hasta la adultez que se logra comprender lo que pasó), la vergüenza (uno de nuestros sentimientos más profundos) y la culpa... superarlo simplemente sucede o no, y desafortunadamente, no lo hace en la mayoría de los casos.En gran parte sucede porque los niños están profundamente solos, porque en todo, dejamos a los niños solos con su dolor. Y luego nos preguntamos por qué se suicidan. Llegan del colegio a contarnos lo qué les pasó y nunca es tan grave, claro, en el caso de que tengan quién los escuche; si no, están Jetix, Cartón Network, MTV, Jota Mario Valencia o Aurelio Cheveroni, que es peor que no tener nada. Los adultos han muerto. No somos quienes ayuden al niño a sacar su dolor, a canalizarlo: lo dejamos solo o con otros niños, que también están solos. No asumimos en la esfera pública, y más preocupante aún, ni en la privada en muchos casos, nuestro rol de adultos. Ese rol tiene que ver con el cuidado y la preservación de la vida, del cuerpo del otro, que en este caso es el niño.Le damos la vida y lo dejamos solo para que vea qué puede hacer con ella.Los dejamos tan solos que muchas veces el niño abusado no sabe que lo que le pasa está mal, sobre todo en los casos en los que el abuso involucra a los padres. Fíjese bien. Imagínese a sus padres (o a su familia cercana) en la infancia más temprana: ellos lo alimentan, le dan un techo, lo mantienen vivo... y luego lo tocan... y como usted es un niño y depende de ellos para preservar su vida (tómelo en el sentido más literal) no puede decir nada porque ni siquiera sabe que es malo, porque tal vez sea justo a cambio del cuidado que le dan. Pasan los años y se da cuenta y es injusto, pero la vergüenza recae sobre su usted. Y usted se culpa, se condena.La mayoría de los niños abusados sexualmente entran en el circuito de la explotación sexual. Es un círculo vicioso impresionante que se ve afectado entre otras cosas por el consumismo: la sociedad exige, para ser amados, posesiones materiales. Si el esquema de “sexo-por-supervivencia” se afianza, es natural que se asocie el éxito material con la explotación del cuerpo. Y luego nos preguntamos por qué hay prostitutas (os) de 12 años
Hola Mariona:
Definitivamente este es un tema muy duro pero creo que el enfoque que le das es muy bueno y concientiza que nadie más que nosostros como padres podemos comenzar a cambiar el esquema.
Comentarios
Definitivamente este es un tema muy duro pero creo que el enfoque que le das es muy bueno y concientiza que nadie más que nosostros como padres podemos comenzar a cambiar el esquema.