A TERESA WILMS MONTTSoy un mar de absurdos de alma y cuerpoPatee y terminé exorcizado por una hipócrita sociedadEstoy ahíto de sinsabores y de orar cual idolatra plañideroHe vivido la desdicha de relaciones tormentosas y pacatasNecesito aprender a volar para escapar de esta prisiónIlustrarme en el soñar, escuchando la sabiduría de la bohemiaNecesito romper con una estética contestataria, la somnolenciaCantar la tragedia emocional de mis absurdos fracasosMe desnudo para que me conozcan tal cual soy y nadie me leeToda mi poesía no es más que el necio diario de un naveganteTestimonio el esplendor y la desgracia del mundo insensible y ciegoLa poesía me obliga o me permite vivir como a todo naufragoA pesar de mi profunda tristeza, a veces ilumino con una sonrisa los versosEstoy cansado de maldecir a las fuerzas oscuras que destruyen al mundoLa vanidad nos impide asumir radicalismos contra este absurdo holocaustoMañana estos versos serán inencontrables ¡devorados por el silencio!Mi desolado corazón solo se compunge con el abandono del desamorLa realidad impiadosa me recuerda que solo la muerte, para el sufrimientoTodo lo que he amado y deseado se logra con una desgarradora realidadNada es más perfecto que un elogio que va más allá de lo usualNo me interesa partir hacia el olvido, sin tiquete de regresoHéctor “El perro vagabundo” Cediel 2010-01-15
Enviadme un correo electrónico cuando las personas hayan dejado sus comentarios –
Comentarios