Dra. Michelle Bachelet.
Secretaria General Adjunta y
Directora Ejecutiva de ONU
Mujeres.
Un México con hambre y sed de justicia es el que, injustamente, nos heredan los gobiernos priistas, panistas y perredistas. Un México bronco, violento, atrapado entre las redes de los intereses de grupo que, a sangre y fuego, buscan ganar la Presidencia de la República. Un México en el que pelean hermanos contra hermanos, intentando quedarse con la mayor parte de las riquezas que se generan en este país. Un México en el que hombres y mujeres, simple y sencillamente, han dejado de creer en las instituciones. Un México en el que las palabras de los candidatos chocan contra un enorme muro, en cuya superficie las mujeres escribieron una sola palabra: ¡Justicia!
Nuestro reclamo viene de tiempo atrás, es decir, hace 28 años. De entonces a la fecha, las mujeres de Chiapas le hemos escrito a personajes muy diversos, para exigir que nos ayuden a resolver un viejo problema: la legalización de los terrenos de los trabajadores de la Universidad Autónoma de Chiapas, alrededor de 37 hectáreas que se adquirieron, colectivamente, para construir ahí la “Colonia Universitaria Dr. Manuel Velasco Suárez”. Felipe Calderón y Juan Sabines, Presidente de México y Gobernador del Estado de Chiapas, respectivamente, recibieron en su momento cartas enviadas por mujeres, antes las cuales expresaron una gran indiferencia, ya que hicieron caso omiso a esos reclamos de Justicia.
También le enviaremos una copia de esta carta al Sr. Ban Ki-moon, Secretario General de la ONU, a fin de que defienda nuestro caso, ya que, de acuerdo a los señalamientos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en Chiapas se han violado varios de nuestros derechos, específicamente los siguientes:
Artículo 17.- Toda persona tiene derecho a la propiedad, individual y colectivamente. Nadie será privado arbitrariamente de su propiedad.
Artículo 19.- Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitaciones de fronteras, por cualquier medio de expresión.
En espera de su respuesta a esta carta, le enviamos a usted y a sus colaboradores un abrazo afectuoso. Estamos seguras de que, a través de ONU Mujeres, las trabajadoras de la UNACH podrán recuperar, en breve, su patrimonio.
¡Alto a la represión! ¡No a la violencia contra las mujeres!
ATENTAMENTE:
LIC. MARIA ORTEGA.
MUJERES DE CHIAPAS, A. C.
Comentarios