“Actuar es crear; inventar es encontrar; dar una forma es descubrir. Al crear descubro. Martin Buber”.
Las mujeres, se han proyectado a lo largo de la historia de la humanidad, a través de manifestaciones escritas, a través de palabras, de batallas pacíficas y a veces no tan pacíficas, han encontrado los espacios, en algunas ocasiones para obtener posiciones en la política, en la sociedad y en cualquier entorno.
Fácil no ha sido, ya que a pesar de su presencia en todos los ámbitos -de acuerdo al archivo digital de la Universidad Politécnica de Madrid- las mujeres, no fueron consideradas, sino hasta la segunda mitad del siglo pasado cuando los historiadores empiezan a rescatar los nombres, las vidas y los trabajos de las mujeres.
Sin embargo, es una forma de decir que la mujer ha realizado la arquitectura de su vida, y con ello ha generado modelos, paradigmas y prototipos, que nos han señalado y trazado un rumbo.
¿Podemos entonces las mujeres actuales, ser las arquitectas de nuestro día a día?
Partimos entonces del concepto de arquitectura, el cual, es el arte y técnica de proyectar y diseñar edificios, otras estructuras y espacios que forman el entorno humano.
Proviene del griego αρχ (arch, cuyo significado es ‘jefe’, ‘quien tiene el mando’), y τεκτων (tekton, es decir, ‘constructor’ o ‘carpintero’).
Luego entonces, somos “las jefes o directoras de la construcción” y yo añadiría “de nuestras vidas”.
Es quizá, cuando puedo expresar, que a lo largo de mi vida, he inventado, he diseñado, quizá cosas tangibles, u otras quizá intangibles. He trazado mi vida, quizá llena de ruidos, de pensamientos, de luces, formas, colores, músicas, de seres queridos.
En mi construcción ha habitado la imaginación, esa mezcla de pasado y futuro, de contradicciones resueltas, de correspondencia, de secretos, de presentimientos, de acciones, de decisiones.
Con sendas conocidas y a veces poco conocidas, pero resuelta a continuar, así levanté mi casa, sin título de arquitecta, -y como manifiesta Cristina García-Rosales en su artículo el mar oculto- fue un acto de amor, en el que reflejé parte de mi pensamiento, busqué la armonía en las cosas bellas, el calor y la seguridad del ser que se siente felizmente cobijado.
He construido con el viento mis sueños, mis objetivos, alguna vez el camino me sorprendió con lecciones y experiencias, así ha sido mi boceto personal.
Dentro de la página web, apuntes de arquitectura digital, la arquitecta Anita Delgado, expresa…Las mujeres con esfuerzo y creatividad, han diseñado y construido edificios que cambian el modo en que las personas vemos el mundo…
¿Tú estás construyendo o edificando tu camino?, este es el mejor momento, hagámoslo…
Comentarios
Estimada Lydia:
Buenas noches, no se exactamente la respuesta, pero puede ser que si, coincidimos hoy, en contruir nuestra vida y tu adicional en ayudar a otras a construir su vida.
Creo que vamos en el mismo camino y muy probablemente objetivos similares, que al construir, ¨cumplamos nuestros sueños y objetivos¨.
Cada día, las mujeres construimos, hoy quizá un ¨puente¨, comunicación entre nuestros hijos, familias o amigos.
Recibe un cordial saludo y continuamos en contacto.
Edith.
En una ocasión leí que las ideas viajan a través de diferentes espacios. Lo he corroborado en varias ocasiones. Hace tiempo ofrezco talleres relacionados con el tema de las mujeres como arquitectas de su vida. Definitivamente puede afirmarse que las ideas flotan y podemos capturarlas y hacerlas nuestras aunque éstas hallan sido descubiertas por otras.¿ Existen las coicidencias?
Estimada Sol:
Así es, esas piedras que en las mas de las veces nos han hecho crecer.
Y cuantas historias construidas por las manos y los pies de las mujeres.
Un saludo cordial.
Edith.
Sí, hasta dándole uso armonioso a las piedras que otros te lanzan, para que el camino sea más ancho o más largo. En el primero incluyendo a otros, en el segundo llegando más lejos.
Saludos Sol