Una carta a mi misma

Querida Martha. Aquí estas todavía en este mundo que tanto te ha gustado. Esta vida que quisieras que no terminara nunca… Tu vida ha sido la de un errante, trotamundos, nómada, gitana. De chica te encantaba ver esas diapositivas de otros lados del planeta en un aparatito que acercabas a los ojos. Te fascinaba sentirte ahí, mediante una realidad virtual teniendo aventuras en mundos fantásticos. Ahora ya no quieres decir a nadie tu edad porque sientes que eres más grande que la mayoría y, esto te da miedo. Miedo de sentir que la vida ya ha pasado y que los años dentro de poco cobraran por ellos mismos con arrugas, cuerpo flácido y dolores. Quieres retener el tiempo y vivir de nuevo la vida vivida, el camino andado. Martha, tu misma te sientes aprisionada sin dejarte ser. Pasas noches de insomnio, sintiendo tedio y vacío por tiempos tan hermosos que se fueron y que no has podido retener y conservar más que en recuerdos. Y en los días que madrugas te sientes ansiosa por realizar una y mil tareas para mantenerte ocupada y lejos de ti misma. Tal vez para no preguntarte ¿qué es lo que has querido hacer de tu vida? ¿Por que ha habido tantas preguntas sin respuestas? o ¿por qué, teniendo una vida resuelta, una y otra vez te has enfrentado a nuevos retos? Aunque estoy muy orgullosa de ti por tu búsqueda constante de felicidad, a veces estoy muy decepcionada que no hayas aprendido a gozar los momentos presentes de la vida, dejando atrás el pasado bien vivido y amado. Tu meta siempre fue la de realizar los sueños anhelados y tu terquedad te encamino siempre a eso. En tu vida has tenido siempre un buen compañero, esposo y amigo y unos hijos que han superado cualquier expectativa tuya y, ahora tus nietos son esa luz hermosa que te maravilla siempre con su imaginación. Yo sé que te ves al espejo y te sientes bien contigo misma. Siempre piensas que para tu edad te ves bien. Tratas con mucho deporte y alimentación sana de mantenerte lo mejor posible. En ti también hay mucha emoción bella y positiva por seguir creciendo y aprendiendo. Has hecho bien en quererte y en amar la vida. Ahora, después de vivir en otras partes del mundo como México, Alemania, Bolivia y luego Mongolia y otra vez Alemania y visitado tantos otros lugares, llega el término del viaje realizado… Y es de nuevo tiempo de sufrir la separación y despedidas. Y es de nuevo, tiempo de desapegos, tiempo de acostumbrarse a otras cosas, a otra vida, otra gente, tal vez otro idioma y otra cultura. Es de nuevo tiempo de decisiones para embarcarse ya que todo lo que se quiso realizar, se hizo y el tic tac del reloj ya dio la hora. Las metas se han cumplido. Ahora la última de ellas es… ¿Regresar de nuevo a casa?... ¿Cuál casa? ¿Regresar de nuevo a un país hermoso y de naturaleza privilegiada como tu México, o como España? ¿Cuándo te darás cuenta que tu casa ha sido el mundo? … tu mundo, estoy segura, siempre lo llevaras donde tu estés. Por eso desde el libro “El Alquimista de Paulo Coelho” quiero dejarte con este pensamiento: Todos los seres estamos en el mundo para algo. Nuestra existencia tiene un sentido. Cada uno tenemos una misión que cumplir. Un camino que seguir. Un sueño que conquistar y que vivir. Un tesoro para buscarlo y encontrarlo. Una Leyenda Personal. Una vocación. Pero muchas veces los hombres no vivimos nuestra Leyenda Personal, sino que nos instalamos en la seguridad de lo que ya tenemos y abandonamos la búsqueda de nuestro tesoro y no vivimos nuestros sueños "Tu tesoro está cerca, está aquí, está a tu lado; pero tú no lo ves, no puedes verlo; Será preciso que recorras un largo camino para que cuando vuelvas puedas, con tu corazón nuevo, encontrar y ver tu tesoro y disfrutar de su belleza".

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Respuestas

  • ¡GRACIAS A TI MALU!!! ...Y no cabe duda que la caricatura de Mafalda queda perfectamente bien. ¡Me encanto! Así como siempre me encanto la intelectual Mafalda.

    Muy buena propuesta tuya la de escribir una carta a uno mismo porque es una manera de analizar lo que tienes guardado profundamente en ti. Esa reflexión de la Conciencia, Alma, Espíritu o Voz interior de la cual a veces poco queremos escuchar o tomar en cuenta. Es por eso que fue un bonito ejercicio para escucharnos y respondernos a lo que guardamos dentro de nosotros mismos y, solo sacamos tal vez, después de platicar mucho con algún amigo íntimo. Era a la vez sin duda alguna un ejercicio difícil pero lo que me encanto también es leer a algunas de mis compañeras y ver como en verdad con sangre escribieron, rebelando ese Yo y dejando al descubierto ese Ego.

    A ti simpática Malu te doy las gracias por esa originalidad del Club de Mafalda

    Martha S.
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