Es hermosa la idea de vivir
el momento, el instante, sin pensar
en lo que queda atrás ni en lo que luego
ha de ocurrirnos a nosotros. Pienso
que ese es un planteamiento de la vida
sano, brillante, positivo, cierto...
Pero a veces el mundo nos enfrenta
con situaciones en que no es tan fácil
cerrar los ojos y dejar que el propio
transcurso de las cosas nos enseñeel camino a seguir... y en esos casos se impone hacer un alto y meditar,pensar las consecuencias de una forma
u otra de proseguir, para nosotros,
pero también para los que queremos.
Vivimos a sabiendas de ser vìctimas y victimarios de las causas y los efectos...
P.D.:¿Còmo poder detener el paso del mismo deseo para mediar las consecuencias?
¿Còmo detenerse en la razòn cuando el corazòn aùlla?¿Còmo detener su latir para enseñarle a pensar luego de tantas caìdas? Sòlo preguntas...
(espero algùn dìa tener aunque sea media respuesta para alguna de ellas)
Nuestra vida es el resultado de los que tambien otros han decidido hacer con la suya... es una cadena de accione A veces encontrar una manera de solucionar un problema trae consigo un daño colateral para otros...algo así como cuando los padres se divorcian, o las adolescentes entran en el rol de madres a destiempos, como cuando alguien decide matar a otro que amenaza su vida...
Así es, y es complicado de aceptar que no solo nosotros tenemos poder para marcar nuestro camino...Así que cuando se piensa en la vida, tienes mucha razon en que debemos pensar en la vida de quienes nos rodean...tan solo para saber que tan grande sera el daño o de que manera podemos hacerles un mejor mañana
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