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Quisiera hacer un recuento a detalle de las decisiones que a conciencia he tomado en mi vida, y se que siempre fueron tomadas a gusto de mi entorno, por ser aceptada, pasaba la vida corriendo al compromiso y haciendo mi propia historia encantada de la princesa que estaba encerrada en la torre más alta del castillo, viviendo pasajes de intento por encontrar al verdadero príncipe de armadura fuerte y sólida que me rescatara y me enseñara el camino a ese mundo mágico en donde no existiera tiempo, ni espacio, espere y espere hasta que un espejismo me hizo mirar a un príncipe diferente que me hacia sonreír por el hecho de mirarme, por esa confianza y tranquilidad por la vida, estaba dispuesta a correr el riego y aprender su camino no hace mundo mágico sino a su mundo real y no importo que no me rescatara porque él se quedó conmigo en esa torre y pensé que era momento de renunciar a mis historias fantásticas y era momento  de crecer y olvidar todo; sentía que era perfecto me sentía segura pues me encontraba en mi territorio y además estaba a mi lado ese hombre increíble al que no podía verle nada imperfecto para el vivía, al que podía fortalecer con todas mis fuerzas porque sentí que era yo era su mundo, y un día desperté y me di cuenta que no tenia el control de nada y que en esta historia yo solo era la maga que cumplía sus antojos, me olvide de mis necesidades solo pensaba en las de el y obvio para el era lo correcto se quebrantó mi corazón pues el ya estaba lejos de ser a quien yo amaba, y mi papel cambio solo esperaba detalles, esperaba esa mirada de admiración, esperaba que me hiciera sentir especial, esperaba y esperaba y solo descubrí su indiferencia, su desamor, mentiras, era tan atinado que lograba descubrirse con sus acciones y palabras; cada noche en silencio mordía las sabanas para que no me escuchara llorar y evitar que me enfrentara suponía que en algún momento me gritara lo que con sus acciones me hacía sentir tenía miedo, pues pensaba que solo era un problema de mi imaginación hasta que descubrí con evidencia una nueva misión en su vida y no pude evitar ese enfrentamiento pues fue muy evidente y solo se indignó y se fue; dejándome con miles de dudas, incertidumbre, sentimiento de abandono, ira, mucho dolor. Me sentí abatida, moría por correr y detenerlo y decirle que yo era la culpable que no me abandonara, pues ese príncipe solo se alejaba y me dejaba no solo atrapada nuevamente si no herida de muerte…

Hoy en día sigue esa lucha de quien paga el divorcio pues el  sarcasmo de esta historia es que hasta este momento niega y jura que jamás me fue infiel, que no cree en el divorcio pero lo increíble es que me extraña y me ama, claro unos días, y después desaparece y siempre regresa cuando estoy a punto de olvidarlo, he aprendido la lección y sé que esta historia no tiene segunda parte, necesito cerrar este ciclo y ya no esperar un príncipe, mejor trabajare en ser una mujer realista con sueños y proyectos que puedan ser compartidos sin esperar ser amada y aceptada, sí llega ese amor mágico será quien quiera compartir una vida respetando y trabajando para los diferentes sueños…. Hoy te puedo decir que me siento feliz porque acepto que no hay culpables genere expectativa en un ser que tiene mente propia y siempre espere algo que no podía controlar y pues bueno a trabajar en ya no ser una Mujer que Ama Demasiado…..