¿Cuántas veces has pensado en la magnitud de tu problema? Si te enfocas siempre al problema sólo percibes su dimensión, su grandeza o su estatura, y mientras lo haces tú te sientes pequeño, estás tan enfocado alimentando la idea de cuan complejo y superior es el problema que no estás prestando atención en ti, en tu grandeza y tus virtudes. La vida se basa en un sistema de aprendizaje correspondiente, es decir que cada tarea que nos toca enfrentar, cada adversidad, corresponde a nuestro nivel de crecimiento, a nuestras virtudes y capacidades. En la escalera del crecimiento personal nunca nos toca una clase de vida cuyos problemas a resolver estén por debajo de nuestro nivel, tampoco por arriba. Si vas a la secundaría no te darán a resolver problemas del pre-escolar, tampoco del colegio universitario, lo que debes de comprender, y las tareas a resolver, corresponden a tu nivel, por tanto la dimensión del problema que enfrentes siempre corresponderá también a tu tamaño…
Hoy ante la dimensión del problema descúbrete grande, ante la magnitud de una adversidad confía en tu fuerza, la vida nunca mandará cargas que no puedas sostenerlas...hoy ante la magnitud del problema está la oportunidad de develar tu grandeza…
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