Hola, me da gusto aprovechar este espacio sólo para compartirles que hace unos días noté a una compañera de trabajo muy triste y había escuchado en "radio pasillo" que su papá, un anciano de 90 años, estaba hospitalizado y en estado de coma, ella no quería que los demás supiéramos para evitar el acoso constante de preguntas acerca de su situación y hacer ésta más difícil. Al fin me atreví a preguntarle y efectivamente tuve la oportunidad de que me compartiera su pena, y por instinto (metiche?) , le dije cuán importante era para su papá y para ella como hija, que lo abrazara y le rezara para ayudar a fortalecerlo espiritualmente para seguir viviendo o bien para emprender su partida. Al paso de los días pasaba a mi escritorio para informarme del estado de salud y para que le diera ánimos, porque me decía que el hablar conmigo le hacía mucho bien.
¿Se imaginan la importancia de prestar nuestro hombro a quien más lo necesita? y no sólo eso, sino ser acertivo y tener cuidado con las palabras que decimos. Desafortunadamente su papi murió hace unos días, no estuve con ella para darle un abrazo y decirle cuánto lo sentía, y vaya que de verdad lo siento! pues perdí primero a mi padre y algunos ayeres a mi querida mamita. Feliz fin de semana!!
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